G20/G8: una presidencia francesa realista y ambiciosa [fr]
LO ESENCIAL
Francia ha asumido oficialmente la presidencia del G20 y del G8 por un periodo de un año, con un objetivo claro: proponer nuevas ideas y aportar respuestas concretas a los nuevos desequilibrios mundiales.
Con realismo y ambición, Nicolas Sarkozy presentó los 6 proyectos prioritarios de la presidencia francesa del G20: 1) reformar el sistema monetario internacional; 2) reforzar la regulación financiera; 3) luchar contra la volatilidad de los precios de las materias primas; 4) apoyar el empleo y reforzar la dimensión social de la mundialización; 5) luchar contra la corrupción; 6) fomentar el desarrollo.
La presidencia francesa del G20 y del G8será una presidencia abierta que hará hincapié en el trabajo en equipo, asociando activamente a nuestros socios y consultando estrechamente a
los países que no son miembros del G20 y a los actores de la sociedad civil.
Por último, Francia propondrá un “nuevo” G8 centrándolo en temas estratégicos: los nuevos retos comunes como Internet y el crecimiento verde; la paz y la seguridad internacionales, la cooperación con África.
LES CHIFFRES
85%: peso de los países del G20 en la economía mundial.
26/27 de mayo de 2011: fecha de la cumbre del G8 que se celebrará en Deauville.
3/4 de noviembre de 2011: fecha de la cumbre del G20 que se celebrará en Cannes.
EL G20, ¿UN FORO ÚTIL?
¡Sí! Lanzado en 1999, a nivel de los ministros de finanzas, para responder a las crisis financieras de los años 90 (sudeste asiático, Rusia...), el G20 es una instancia de cooperación y coordinación económica internacional que reagrupa a los países industrializados (el G8) y a los principales países emergentes, o sea, el 85% de la riqueza internacional y 2/3 de la población mundial.
Desde el comienzo de la crisis, el G20 se impuso como EL nuevo foro mundial de cooperación económica:
En noviembre de 2008, por impulso del Presidente de la República, el G20 se reunió por primera vez a nivel de los jefes de Estado y de
Gobierno para aportar una respuesta concertada y coordinada a la crisis económica más grave que ha vivido el mundo desde los años 30.
¡Esta estrategia ha dado resultados! Desde la cumbre de Washington (noviembre de 2008) hasta la de Seúl (noviembre de 2010), hemos sentado las bases de un nuevo orden económico y financiero mundial: reglamentación de las bonificaciones, sanciones contra los paraísos fiscales, regulación de los hegde funds y de las agencias de calificación, multiplicación por tres de las exigencias de fondos propios para los bancos… Adelantos considerables que han permitido moralizar el capitalismo financiero a escala internacional.
Esta dinámica no debe detenerse hoy. Si el G20 desea conservar su legitimidad, no puede conformarse con aplicar las decisiones adoptadas durante las cumbres anteriores. El G20 debe lanzar nuevos proyectos, necesarios para la estabilidad y la prosperidad del mundo. Esto es lo que Francia ha propuesto a sus socios estableciendo una agenda
ambiciosa para su presidencia en 2011.
¿CUÁLES SON LAS PRIORIDADES DE LA PRESIDENCIA FRANCESA DEL G20?
Para alcanzar estos objetivos,el Presidente de la República presentó las 6 prioridades de la presidencia francesa el pasado 24 de enero en el Palacio del Elíseo:
1. Reformar el sistema monetario internacional: la presidencia francesa desea aportar respuestas colectivas a la volatilidad de las monedas y a la exposición excesiva de los países emergentes a la retirada masiva de capitales. Con este fin, deseamos: i) velar por una óptima coordinación de las políticas económicas para reducir los desequilibrios mundiales y reforzar el papel del FMI en materia de vigilancia de dichos desequilibrios; ii) adoptar reglas multilaterales comunes en materia de control de flujos de capitales y dar al FMI un verdadero poder de vigilancia en este campo; iii) reforzar los medios del FMI para ayudar a los países enfrentados a una crisis de liquidez; iv) acompañar la internacionalización de las monedas de los grandes países emergentes, como el yuan chino, reflexionando a su posible integración en la cesta de derechos especiales de giro (DEG).
2. Reforzar la regulación financiera: la presidencia francesa deberá velar por la aplicación efectiva de las decisiones tomadas en las cumbres anteriores. Asimismo, deberá prevenir la emergencia de nuevos riesgos, por ejemplo, mejorando la protección de los consumidores de servicios financieros o regulando los mercados de materias primas.
3. Luchar contra la volatilidad de los precios de las materias primas: la acción de la presidencia francesa estará destinada a regular mejor los mercados de materias primas, mejorar la transparencia de los mercados físicos, prevenir y gestionar mejor las crisis alimentarias, reforzar los instrumentos de cobertura para proteger mejor a las poblaciones más pobres contra la volatilidad excesiva de las divisas.
4. Apoyar el empleo y reforzar la dimensión social de la mundialización: la presidencia francesa se ha marcado cuatro objetivos prioritarios en este ámbito: el empleo, especialmente de los jóvenes y de las personas más vulnerables; la consolidación de las bases de protección social a nivel internacional definiendo principios comunes; el respeto de los derechos sociales y del trabajo; y, por último, una mayor coherencia de las estrategias de las organizaciones internacionales.
5. Luchar contra la corrupción: el objetivo será implementar el plan anticorrupción adoptado durante el G20 de Seúl destinado a sanear el sector de los negocios, luchar contra la evasión fiscal y reforzar el Estado de derecho.
6. Fomentar el desarrollo: África será una de las prioridades de la presidencia francesa. Nuestros esfuerzos se centrarán en particular en la seguridad alimentaria y el desarrollo de las infraestructuras, marcándonos como objetivo la adopción de una lista de proyectos concretos que deberán implementarse prioritariamente. Por otra parte, Francia continuará el debate sobre las financiaciones innovadoras, que son indispensables para respetar los compromisos contraídos por la comunidad internacional en el campo del desarrollo y de la lucha contra el calentamiento climático. En particular, defenderemos la posibilidad de instauración de un impuesto —infinitesimal— sobre las transacciones
financieras.
Estos proyectos son complejos, pero esenciales, y no pueden diferirse, como lo recuerda la actualidad internacional (temor de una “guerra de monedas”, explosión del precio de las materias primas). Francia aborda su presidenciacon ambición y realismo: somos perfectamente conscientes de que proyectos de esta envergadura no podrán finalizarse en un año, pero estamos determinados a que la presidencia francesa sea una presidencia útil, que permita definir pistas de reformas concretas y velar al máximo por su aplicación desde la cumbre de Cannes que se celebrará el próximo mes de noviembre.
¿CUAL SERÁ EL MÉTODO DE LA PRESIDENCIA FRANCESA?
Francia ha optado por una presidencia abierta, por un trabajo en equipo asociando estrechamente a sus socios para construir con ellos un consenso sobre estos temas difíciles. En las últimas semanas, Nicolas Sarkozy ha dedicado mucho tiempo no sólo a consultar a los jefes de Estado y de Gobierno socios del G20 sino también a otros mandatarios del mundo. El presidente solicitó igualmente la colaboración de varios dirigentes del G20 para promover conjuntamente las prioridades de la presidencia francesa:
La canciller alemana Angela MERKEL presidirá un grupo de trabajo sobre la reforma del sistema monetario internacional.El presidente chino Hu JINTAO aceptó que se organizara en China un seminario de alto nivel consagrado al tema de las monedas en el mes de marzo.
El presidente ruso Dimitri MEDVEDEV aceptó trabajar en particular activamente en los disfuncionamientos de los mercados de materias primas.
El primer ministro británico David CAMERONtrabajará en la reforma de la gobernanza mundial.
Francia también decidió asociar a su presidencia a los países que no pertenecen al G20.Nicolas Sarkozy participó en la cumbre
de la Francofonía celebrada en Montreux en octubre de 2010 y en la cumbre de la Unión Africana celebrada en Adís Abeba (Etiopía) el pasado 30 de enero.
Por último, Francia decidió igualmente asociar a su presidencia del G20 y del G8 a numerosos actores de la sociedad civil: ONG, expertos, economistas, investigadores, interlocutores sociales franceses e internacionales, empresarios y personalidades reconocidas con los que el Presidente ha multiplicado las reuniones.
¿Y EL G8?
El G8 y el G20 son dos foros complementarios.Francia propondrá un “nuevo” G8 centrándolo en temas estratégicos:
Los nuevos retos comunes, en particular Internet y el crecimiento verde: esta será la primera vez que los jefes de Estado y de Gobierno abordarán temas relacionados con Internet. Antes de la cumbre de Deauville, Francia organizará un Foro con los principales operadores de la economía digital de los países del G8.
La paz y la seguridad internacionales: además de los temas políticos (Irán, Oriente Próximo, Afganistán, Pakistán, no proliferación...), la presidencia francesa hará particular hincapié en el refuerzo de la cooperación internacional para hacer frente a las nuevas rutas del narcotráfico entre los países de América Latina, África del Oeste y Europa, y en la lucha contra el terrorismo, principalmente en el Sahel.
La cooperación con África: la presidencia francesa renovará y reforzará la cooperación en torno a la idea de responsabilidad compartida. El G8 informará sobre los compromisos contraídos en materia de desarrollo en el ámbito de la salud y la seguridad alimentaria y, por su parte, África realizará un balance de las acciones llevadas a cabo y los frenos a su desarrollo. El objetivo será mejorar la eficacia de la ayuda.
CLÉS ACTU
N°235 – 31 de enero de 2011